La fiscal Estela Mary Ramírez presentó imputación contra dos ciudadanos libaneses, padre e hijo, por el supuesto hecho punible de violencia familiar. Ellos son Abdul Wahad Chahade (51) y Ahmad Wahad Chahade (23), quienes quedaron a disposición del Juzgado Penal de Garantías.
Según la investigación fiscal, existen sospechas fundadas que los dos encausados ejercieron violencia física y psicológica sobre sus hijas y hermanas respectivamente, Jina Abul Wahad Chahade y Janna Wahad Chahade, durante varios años. El padre, según el escrito de imputación, controlaba cada aspecto de la vida de sus hijas, desde sus actividades diarias hasta sus relaciones sociales.
Las víctimas relataron haber sufrido golpes, amenazas constantes y un ambiente familiar dominado presumiblemente por el miedo. Los episodios de violencia física se intensificaron en los últimos meses, culminando en un hecho particularmente grave. Estando las víctimas en una quinta ubicada en Ciudad del Este, Abdul irrumpió en la habitación de sus hijas para increparlas por supuestamente no compartir con los demás miembros de la familia. Enfurecido, les profirió amenazas de violencia física y les quitó sus teléfonos celulares.
Más tarde, en la posada familiar, el hombre atacó brutalmente a su hija Jina. La pateó supuestamente en la espalda, la golpeó en la cabeza, la nuca y el rostro, y la azotó con un cinto en las piernas. Finalmente, la obligó a permanecer de pie en una esquina de la habitación durante toda la noche, según refiere el escrito fiscal. Aquella vez, intervino Janna para intentar calmar a su padre y evitar más violencia. Pero también fue amenazada de sufrir una golpiza.
Asimismo, en julio de 2023, un nuevo episodio de violencia familiar afectó a las hermanas. Ahmad Wahad Chahade, hermano de las víctimas, atacó a Jina en la vivienda familiar tras una discusión. La agarró del cuello, la golpeó en el rostro y la sofocó presuntamente hasta casi asfixiarla. Su hermana Janna intervino para defenderla.
Cansadas de los constantes maltratos, Jina y Janna decidieron huir de la casa con la ayuda de un amigo y posteriormente radicaron la denuncia ante la Unidad Especializada en la Lucha contra la Violencia Familiar. A continuación, la fiscal Estela Ramírez recopiló los elementos de sospecha y presentó la imputación.
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